La soldadura es la operación de unión de dos piezas. Se aplica en multitud de sectores, como pueden ser la construcción, la industria de la automoción, la industria naval, la fabricación de piezas o estructuras metálicas en el sector metal,…
Es un trabajo que conlleva distintos riesgos en función de los materiales, el metal a soldar, los gases o fundentes que pueda emitir, el tipo de soldadura,… Los humos de soldadura conforman un riesgo laboral esencial de esta tarea.
Existen distintos tipos de soldadura, como la soldadura por arco eléctrico, soldadura TIG, soldadura MIG-MAG, plasma, soldadura oxicorte, soldadura oxiacetilénica,…
Soldadura: riesgos laborales
Riesgos higiénicos
En la soldadura hay agentes contaminantes químicos como los humos de soldadura o humos metálicos que pueden dar lugar a trastornos respiratorios, digestivos, etc.
Más adelante en este artículo te contamos qué son los humos de soldadura y problemas de salud asociados.
Otros agentes físicos pueden ser:
– Calor o frío: por hacer trabajos de soldadura en exterior o por el uso de herramientas como sopletes. ¿Sabes cómo influye la temperatura en el trabajo?
– Ruido: por el uso de los equipos de soldadura o los sistemas de ventilación y extracción. ¿Sabes qué impacto tiene el ruido laboral en la salud?
– Radiación: por ejemplo, radiación ultravioleta en la soldadura por arco eléctrico o radiación infrarroja en la soldadura oxiacetilénica y oxicorte.
Riesgos de seguridad
Por el uso de equipos de trabajo de soldadura pueden ocurrir quemaduras, golpes, cortes, contactos eléctricos, etc.
También el propio lugar de trabajo puede llevar a accidentes de trabajo por condiciones inseguras. Por ejemplo, pueden ocurrir caídas, resbalones, etc.
Riesgos ergonómicos
La carga física y visual, los movimientos repetitivos o las posturas forzadas pueden llevar a fatiga, disconfort o trastornos musculoesqueléticos, entre otros.
Riesgos psicosociales
Algunos factores como las condiciones de trabajo o una planificación inadecuada pueden derivar en insatisfacción, fatiga mental o estrés.
EPP para soldadura
A continuación te dejamos un listado orientativo de los equipos de protección individual (EPIs) para la soldadura en general. En cualquier caso, es imprescindible la evaluación de riesgos por parte de una persona experta.
Protección ocular y facial para soldadura
Existen gafas de soldar con lentes de determinados tonos en función del trabajo de soldadura a realizar.
Las pantallas de soldadura se adecúan al tono que requiera la soldadura, protegiendo de la radiación ultravioleta e infrarroja. Deben ser compatibles con la protección respiratoria utilizada. La protección ocular y facial también sirve para evitar la proyección de partículas
Protección respiratoria para soldadura
Puede ser necesaria la protección respiratoria para los humos de soldadura (gases y/o partículas). El tipo de protección respiratoria dependerá del tipo de material contaminante, del entorno de trabajo y del tipo de soldadura.
La protección respiratoria puede ir desde la protección frente a partículas con mascarillas desechables hasta el uso de filtros respiratorios combinados (protección frente a gases y partículas), tipos de filtros A, B, E, P:
– Filtro respiratorio tipo A: color marrón, protección frente a gases y vapores orgánicos.
– Filtro respiratorio tipo B: color gris, protección frente a gases y vapores inorgánicos.
– Filtro respiratorio tipo E: color amarillo, protección frente a dióxido de azufre y otros gases ácidos.
– Filtro respiratorio tipo P: color blanco, protección frente a partículas.
¿Qué son los humos de soldadura? Problemas de salud
Los humos de soldadura contienen gases y partículas. Las partículas son de tamaño variable, desde el tamaño de un grano de arena hasta no verse a simple vista y ser inhalables.
Estos humos de soldadura no deben alcanzar las vías respiratorias o, si lo hacen, deben haberse diluido previamente mediante sistemas de ventilación.
A corto plazo, los humos de soldadura pueden ocasionar problemas como irritación ocular, nasal y de la garganta, mareos, náuseas, cefaleas, fiebre por humos metálicos,…
La fiebre por humos metálicos (fiebre, escalofríos, dolores, vómitos, debilidad y cansancio) es más frecuente los lunes, ya que es más probable que ocurra tras varios días sin exponerse a los humos de soldadura.
A largo plazo, los humos de soldadura se relacionan con problemas pulmonares como asma, enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) o cáncer de pulmón.
Otras complicaciones pueden ser cáncer de laringe, cáncer de las vías urinarias, úlceras estomacales, daños renales y daños en el sistema nervioso.
También conllevan un aumento de la probabilidad de sufrir ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares.
Guantes de soldadura
Los guantes de soldadura están hechos para proteger del calor, normalmente están fabricados con piel de serraje y fibras de para-aramida.
El famoso hilo Kevlar de las costuras de la protección para el calor es un tipo de para-aramida. Son guantes que pueden proteger alrededor de los 350 °C, según el grosor de la para-aramida. Además de resistente al calor, la para-aramida es resistente al corte también.
Las meta-aramidas, otro tipo de fibras, son ignífugas y proporcionan una buena barrera de aire que separa la fibra de la fuente de calor, dando protección adicional, aunque la protección al corte de la para-aramida es superior.
Ropa de protección para soldadura
En la soldadura se recomienda la ropa de trabajo retardante de la llama y resistente a fuego, chispas, partículas a alta temperatura,…
Puede ser necesario el uso de camisas ignífugas, pantalones ignífugos o monos ignífugos completos.
También existen manguitos de soldadura que protegen hasta el hombro, delantal de soldadura para proteger el torso del cuerpo, capuchas de soldadura para proteger desde la cabeza a los hombros o polainas para las piernas.
Es común el uso del cuero serraje vacuno y costuras de para-aramida, al igual que en los guantes de soldadura.
Botas de seguridad para soldadura
Generalmente el calzado de seguridad para soldadura es calzado antiestático, sin componentes metálicos y transpirable, con cierre de velcro para quitárselo en caso de accidente.
El calzado de seguridad para soldadura está equipado con puntera reforzada y tiene alta resistencia a impactos, al calor, a la abrasión y a la corrosión.
Es recomendable que tenga suela antideslizante, resistente a temperaturas extremas y a hidrocarburos, por ejemplo para plataformas, mantenimiento, fábricas, refinerías, etc.
Arnés de seguridad
En caso de se realice la soldadura en altura, será necesario protegerse de caídas a distinto nivel con un arnés de seguridad apropiado.
En definitiva, la soldadura necesita de unos EPIs de calidad y adecuados para poder trabajar minimizando al máximo los riesgos.