Una vez más llega la vuelta a la rutina. La vuelta al trabajo de las vacaciones a veces puede hacerse cuesta arriba, por lo que queremos darte algunos consejos que podrán ser de ayuda.
Además, este año se convierte en especial: muchas personas hacen una vuelta al trabajo presencial, después de mucho tiempo tele trabajando desde casa. Esto implica nuevos tiempos en el horario y volver a relacionarse con los compañeros durante muchas horas, lo cual se añade a la dificultad de vivir en tiempos de crisis sanitaria.
Volver a la rutina de nuevo es positivo, pero requiere de un tiempo de adaptación al entorno, aunque sea algo que hacemos cada cierto tiempo durante el año.
Que la adaptación sea óptima puede favorecer una mejor atención y concentración al trabajar, mejor humor y menores niveles de estrés, habiendo así una menor probabilidad de accidentes de trabajo y afecciones profesionales.
Te dejamos algunos consejos para afrontar esta vuelta al trabajo tan diferente de la mejor manera posible, por ti y por tu salud:
- Sigue unos hábitos saludables
- Ajusta tus horarios de descanso
- Planifícate
- Mantén durante tus hábitos de ocio
- La actitud es importante
- Ve con tranquilidad
- Sigue leyendo para saber más.
1. Sigue unos hábitos saludables
Tener una dieta saludable, hacer ejercicio y dormir unas ocho horas siempre son hábitos beneficiosos para el organismo pero, en caso de afrontar un estresor como es la vuelta al trabajo, ayudarán aún más a que el cambio sea más llevadero.
En el caso de la alimentación, si haces la vuelta al trabajo presencial, trata de hacer un esfuerzo e intenta cocinar la comida de tu almuerzo en lugar de consumir platos preparados o comida rápida en exceso. Es común caer en estas prácticas sobre todo en las primeras semanas, así que planifica bien tus tiempos para tratar de evitarlo.
2. Ajusta tus horarios de descanso
En vacaciones, a veces la hora de despertar y de ir a dormir se alarga, con lo que el paso repentino de esto al horario de trabajo no es demasiado positivo. Es recomendable ir ajustando los ritmos de sueño a la rutina laboral, preferiblemente desde unos días antes para favorecer la adaptación.
Si aún estás de vacaciones, puede ser una buena opción que vayas intentando despertarte un poco antes, poco a poco.
3. Planifícate
Al principio será necesario ponerse al día con las tareas que quedaron a medias y con las nuevas que hayan podido surgir mientras estabas de vacaciones. Dedica un tiempo a ponerte al día y a revisar el estado de los proyectos que estén en marcha, sin intentar abarcar demasiado. Utiliza las herramientas de planning que puedan facilitar tu organización.
Es normal necesitar un par de días para organizarse, comunicarse con el resto del equipo y planificar el nuevo trabajo pendiente. Recuerda respetar el horario de trabajo y las franjas horarias preestablecidas: organizarse y planificarse también es trabajar.
4. Mantén tus hábitos de ocio
Salir a pasear al atardecer por la playa, tomar algo con tus amigos por la tarde, leer tras el almuerzo o desayunar con tranquilidad pueden ser algunas actividades que hacías durante las vacaciones. Mantenerlas durante al menos un tiempo puede ser positivo, ya que hará la transición hacia los nuevos hábitos más espaciada, llevadera y digerible. Incluso puedes aprovechar para disfrutar tu ocio con tus compañeros de trabajo al terminar la jornada.
De cualquier manera, es esencial mantener un equilibrio entre la vida personal y la laboral, sobre todo en momentos más estresantes como la vuelta al trabajo. Permítete desconectar.
5. La actitud es importante
Entrar en un bucle de pensamientos negativos, expresar numerosas quejas o focalizarte en aspectos pesimistas no ayudará mucho a adaptarse. No hay que negar o evitar las emociones desagradables, sino darse cuenta de que están ahí, entenderlas, aceptarlas, gestionarlas e integrarlas.
Ser consciente de que este proceso es temporal y tener un objetivo nos ayudará a afrontar desde dentro la vuelta al trabajo. Buscar el apoyo de otras personas (compañeros de trabajo, familia, amigos,…) también es positivo, pero sin caer en una excesiva negatividad con los demás. Poco a poco.
6. Ve con tranquilidad
Tanto si haces teletrabajo como te incorporas a trabajar presencialmente, intenta reservar algo más del tiempo justo y necesario para prepararte antes del trabajo y para desplazarte allí, si se da el caso.
Hacer nuevas rutinas con prisas no ayudará, así que en lugar de dormir cinco minutos más, utilízalos: la tranquilidad de no ir con prisas será muy beneficiosa para tu estrés, tu estado de ánimo, tu salud física e incluso tu humor.
Volver al trabajo con seguridad
Una vuelta al trabajo saludable facilitará un desempeño con seguridad, sobre todo en una situación tan complicada como la actual en la que hemos necesitado incorporar muchos nuevos hábitos como el teletrabajo, para al final volver a trabajar presencialmente.
Recuerda que el estado de la persona influye con gran peso en la aparición de accidentes de trabajo. Todas estas medidas ayudarán a disminuir condiciones de poca atención, estrés, ansiedad, prisas y otras circunstancias negativas, disminuyendo la probabilidad de accidentes laborales.
Toma nota de estos consejos, adáptalos a tu situación y disfruta de una vuelta al trabajo segura, feliz y saludable.